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Hoy quería compartir un poco el curro que estoy haciendo con la instalación que habrá en escena. Y lo primero que me viene la mente es que sois vosotros, que habíes estado ahí, aportando aquello que teníais por casa, aquello que os sobraba, o a veces considerando que me hacía más papel a mí que a vosotros, los protagonistas de esta historia. Así que gracias, muchísimas gracias por el apoyo. No sabría qué hacer sin vosotros.
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[:es]Y como lo primero en lo que pienso es en esa ayuda sin la que esto sería posible, antes de soltar mi rollo; los agradecimientos. Gracias a María Asensi, por hacerme llegar muñecas tan estupendas. A Conchi, mano desconocida y amiga. A Sandra por las barbies. Al humano granaíno desconocido que abandonó un scalextric en el parque. A Domingo Mestre, sin cuyo apoyo casi nada de este espectáculo sería posible. A Stavros y Salomé, por el es-pec-ta-cu-lar presente (No os perdáis la preciosa tienda de Salomé en la c. Roteros). A la mushing woman Àgueda, por estar presta a la salvación. Y cómo no, a Míriam Cuenca, que me está salvando la vida a tantos niveles que no voy a saber cómo agradecérselo nuuuuunca y me regala impresoras con premio. Ah, sí, y a ebay, por aportarme tanto por tan poco, jajajaja. 
Bueno, ¿y qué está haciendo VickyLeaks con tanto regalo y compra por subasta (y de otras procedencias)? En este momento estoy ultimando el montaje y la programación de los dos Arduinos que habrá en el suelo de Inestable durante los 4 días de estreno del espectáculo, y de algunos de los elementos que están dándome un poco de guerra. Argh!!!
Una pequeña instalación basada en muñecos de varias procedencias, tamaños y características que vienen a intentar dar un poco más de sentido al tema que centra el espectáculo, la indeferenciación del ser humano en sociedad, la sociedad-masa, la objetualización del cuerpo femenino, la violencia sobre nuestra esencia. Un muñeco que se mira al espejo y no quiere seguir viéndose, unas barbies que miran un bebé porque desearlo es lo que se espera de ellas como mujeres, unos muñecos en roles humanos que se les presupone por cuestión de género cuando en realidad no tiene nada que ver con su naturaleza plástica, una muñeca despiezada que camina hacia sus propias partes.
Algún autómata y en general escenas iluminadas controladas informáticamente es lo que os encontraréis al entrar en Inestable entre el 12 y el 15 de febrero. Posiblemente los elementos más pequeños de todos los que veréis allí, pero los que más trabajo y esfuerzo han requerido para tener un buen funcionamiento. Y es que una no es ingeniera ni experta en todo ello, pero estoy en ello 😉
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